Análisis de bolsa: Deshojando el problema griego

bolsas mercados

Como si fuese una margarita a la que se le va deshojando lentamente, al problema griego le quedan únicamente un par de hojas. La cuestión es que ya no sabemos cual fue la última hoja arrancada, la del acuerdo o la del no acuerdo. Tras los últimos acontecimientos parece ser que nos encaminamos a un no acuerdo con una probable salida del euro del país griego. El lunes las bolsas subieron como si no hubiese una sesión nueva al día siguiente para seguir comprando ante un acercamiento de posturas entre los griegos y sus acreedores. Fue la primera vez en cinco meses que los helenos hicieron un ofrecimiento serio. Por eso las bolsas subieron, los inversores estaban deseosos porque se alcanzase un acuerdo y la política pasase a un segundo plano para poder entrar en juego la bolsa y los mercados en su estado habitual. Durante el resto de la semana hemos vivido unas sesiones planas ante el enfriamiento y la no concreción de propuestas.

Ayer el primer ministro griego Alexis Tsipras decidió llevar al parlamento la votación de un referéndum para que sea el pueblo griego quien acepte o no acepte las propuestas de la Troika. No se si es un acto de valentía o de cobardía, pero lo que si es seguro es que es un político incapaz de gobernar a su país. En cinco meses se ha puesto en contra a todos sus socios europeos exigiendo solidaridad y dinero y no cumpliendo con las obligaciones que le pide compartir el conjunto del pueblo europeo.

Hoy se ha sabido que mañana no abrirán los bancos griegos, el temido corralito ya está a la vuelta de la esquina, y durante todo el fin de semana los griegos no han dejado de sacar euros en metálico de los banco. Me pregunto que se merecen estos ciudadanos que el próximo día 5 de julio es muy probable que vote en contra de un acuerdo con el conjunto de los europeos. Es fácil: coger el petate e irse, y a continuación que vayan a pedir financiación a pueblos comunistas. No tienen más que llamar a las puertas de países como Rusia, China o Venezuela. Que les vaya bonito.

Las bolsas europeas han subido esta semana alrededor del 4% o más. La verdad es que da igual porque es posible que esta semana nos demos un paseo a la baja. En definitiva, parece ser que la bolsa se ha convertido en un juego de riesgo. La verdad es que iempre lo ha sido, solo que esta vez es imposible hacer pronostico alguno que siga la más mínima coherencia económica o empresarial. En julio viviremos un aluvión de dividendos de nuestras empresas. En estos momentos es cuando uno se acuerda el haber apostado acertadamente por valores con buenos fundamentales y cuyos directivos se acuerdan de retribuir a los accionistas a la espera de que pase el temporal.

 

El Observador - JM